C U A D E R N O D E B I T Á C O R A d e l C l u b d e A m i g o s K R O N O S l a N a v e d e l a F i l o s o f í a y l a C i e n c i a e l A r t e y l a P o e s í a e l H u m o r y e l M i s t e r i o http://www.line-pro.es/kronos/entra_al_foro.html S U M A R I O Sábado 28-3-98 Edición de Tarde. ___________________________________________________________ Cimat SA_______________________________________El encuentro Quirón Alvar______________________________Sábados Musicales. Revista de Ciencia____Laser, Arte y Farmacos Iberoamericanos ___________________________________________________________ From: joan@cambrabcn.es (Cimat SA) Subject: El encuentro Jaime estaba de pie delante del banco de largas tiras de madera de la Estación Central. Alisó su uniforme del Ejercito y estudió a la muchedumbre que deambulaba por el amplio vestíbulo. Estaba buscando a la muchacha que había ganado su corazón, la que llevaría una rosa en las manos. Su interés por ella había empezado un año y medio antes en la biblioteca Pública. Había cogido un libro que estaba fuera de su estante y que le había intrigado, no por su contenido, sino por la caligrafía de las notas en el margen. El suave trazo de la letra era inequívocamente femenino, y reflejaba un alma pensativa a la vez que profunda. Enseguida se sintió atraído por la misma y deseoso de saber mas sobre su dueña. Fue ojeando el libro, deteniéndose en cada anotación, hasta que en la contraportada vio el nombre de su autora: Marina Vélez. Tuvo que dedicar bastante tiempo y esfuerzo en averiguar la dirección de Marina, y cuando lo logró le envío una carta esperanzada y expectante presentándose e invitándola a responder. Durante los siguientes quince meses, ambos creyeron conocerse a través del correo. Cada carta era como el abono para la semilla que se sembró en las primeras. Un romance, puro, profundo, inquietante y verdadero estaba surgiendo entre los dos. Jaime le pidió una fotografía, pero ella se negó aduciendo que si realmente le quería no le importaría su apariencia. Finalmente quedaron de acuerdo en conocerse y en ir a cenar, y se citaron para dentro de dos semanas en vestíbulo de la Estación Central. "Me conocerás por la rosa roja que llevaré en la solapa de mi vestido". Y aquí estaba él, después de haber pasado dos semanas agridulces soñando con el encuentro, esperando a una muchacha desconocida, detrás de una rosa roja. De pronto vio a una mujer joven y estilizada dirigiéndose hacia él. Su andar era grácil, su pelo dorado se revolucionaba con unos rizos que se escondían detrás de la orejas, sus ojos eran brillantes y vivos. Los labios y la barbilla tenían una firmeza mansa y el traje de tenues tonos verdes daba la impresión de que la primavera avanzaba por el vestíbulo. Jaime empezó a caminar hacia ella, olvidándose completamente de mirar si llevaba una rosa o no. Cuando se movió una sonrisa provocativa de aquella joven encorvó sus labios y murmuró: "¿No encuentras lo que buscas, soldado?". De una forma automática, Jaime hizo ademán acercarse y entonces vio a Marina. Ella estaba de pie casi directamente detrás de la muchacha. Era una mujer que había pasado con creces los 40, con el pelo encanecido recogido debajo de un sombrero bastante usado, bajita y rechoncha, los pies enfundados en zapatos de medio tacón. Y una rosa roja en la solapa. La muchacha del traje verde se iba alejando y Jaime se sentía partido en dos. Por una parte quería perseguirla, estaba perdiendo algo, se decía, y por otra, era tan profundo el anhelo de conocer a la mujer cuyo espíritu le había cautivado... Y ésta, estaba allí de pie, con su cara pálida, gordezuela, mansa y sensata. Sus ojos grises tenían un caluroso y amable centelleo. Los dedos de Jaime apretaron el libro de cuero que era la identificación que habían pactado, y se dijo: "Esto puede no ser amor, pero es algo precioso, quizás algo mejor que el amor..." Entonces encogió los hombros, extendió su mano mostrando el libro a la mujer, y habló con la sensación de tener un gusto amargo producto de la renuncia a aquella mujer de verde. " Yo soy Jaime, Usted debe ser Marina. ¿Podría invitarla a cenar?" La cara de la mujer ensanchó en una sonrisa tolerante. "Yo no sé nada sobre eso, hijo," contestó ella, "pero la señora joven, la del traje verde que pasó hace unos instantes me pidió que llevara esta rosa en mi chaqueta, y me dijo que si Vd. me invitaba a una cena, yo debía decirle que ella le está esperando en el restaurante de la estación. Ella me comentó algo sobre un tipo de prueba..." El libro cayó mansamente de las manos de Jaime al suelo. Sus ojos se abrieron un poco más y su sonrisa se contrajo en un rictus entre complacencia y complicidad. ___________________________________________________________ From: Quirón Alvar Subject: Sábados Musicales. Muy buenas: ¿Sabeis? Me encanta saludar, me gusta saludar, me siento feliz saludando, me siento reconfortante y elástico, me flipa un montón: ¡¡¡¡HOLA!!!! Ea, he dicho. De nuevo un Sábado más, me encanta que el Tiempo vaya a la velocidad de la Luz, prefiero que sea así antes de ponerme contrario a lo pronto que pasa todo y que no hay tiempo de nada; es mejor hacerse aliado del Tiempo, las consecuencias son más placenteras. EL BAILE DE LOS MÚSICOS (Capítulo 18) (6ª PARTE) EL SALÓN SONORO ***************** Una vez que los músicos hubieron abandonado El Templo de Zedfank, puesto que el Dios iba a hacer acto de presencia, se introdujeron en el Gran Salón Sonoro. En este Salón la charla y la conversación seguiría abordando los diferentes temas que a todos unía: La Música. --Amigos del Tribunal Musical, -hablaba un músico desde el público- ¿Cuando podremos hablar los modernos? O sea, nosotros, los que hacemos cosas ahora y todo eso. --Mi buen amigo Glass, -decía Beethoven- cuando gustes por el amor a todos los Dioses. Puedes empezar cuando plazcas. Philip Glass encaminó sus pasos hacia el estrado, una vez allí habló. --Y no es que me moleste oír hablar a las grandes mentes que aquí se concentran, pero un pequeño espacio para los que ahora hacemos lo que podemos y nos dejan, no está mal. "De lo que quiero hablaros, colegas todos, es de la Armonía. Je! Bien pensado es un tema que casi no llega a serlo, me explico: Hasta el momento en realidad no hemos dejado de hablar de eso, y yo a lo mejor no sería quién para hablar de tal aspecto, entre otras cosas porque estoy siendo hablado por alguien que no soy yo, pero bueno, dejemos a la fantasía que vuele por donde guste. "La Armonía de las Músicas y de los Músicos es algo que debiera ser de Lógica pura y dura, pero no. Hay una especie de duelo que siempre está ahí presente para hacernos la vida imposible y distinguir quién es el que lo hace mejor y quien es el que lo hace peor... -- Eh, eh, eh. Un momento. Saltó casi exasperado el señor Anónimo. -- ¿Como que estás siendo pensado por otro que no es usted mismo? ¿Acaso piensa que los demás están pensando por ellos mismos y se acabó? -- Hombre, dentro de lo que cabe ellos han hecho lo que tenían que hacer, y ahora se les estudia, por lo tanto, se puede pensar que es más fácil hablar desde ellos que desde mi. -- Con su permiso, señor Glass y con el de todos, les digo que los músicos y su Arte confieren -desde mi punto de vista- un poder ilimitado al que estudia, observa, escucha, filosofa o haga lo que sea. Ese poder tiene una sutil manera de experimentar sus propias cosas. "Intentaré explicarme: Hay casos tan claros de acercamiento de la obra al escuchante, que es en ese caso cuando ambas partes, músico y oyente, ven las mismas cosas; ven de las diversas maneras que hay de ver, claro; entre otras con los ojos y con el alma, y por otra parte, con esos ojos críticos esperanzados en grado sumo de encontrar el fallo, el error. Y por otro lado esos ojos, esos oídos convertidos en un gran multi sentido que perciben las bellezas de la vida, como un sencillo paisaje. "Habría quienes vieran en ese paisaje lo erróneo, pero de verdad, esos no cuentan. Y ahí están esos de los que usted habla; los catalogadores y demás especies afines. -- Perdóneme, señor Anónimo.-Vuelve a hablar Glass- Todo lo que dice está muy bien, pero lo importante es hacer la música; hablar de ella es como hablar del aire. Creo que existen muy pocos momentos históricos donde el tema de la Música haya salido bien parado, es un tema muy resbaladizo. -- Y muy peligroso. -Contesta el Señor Anónimo- Pero no importa, se trata de luchar con armas creadoras. Y claro que hay que hacerla, a la música, y componerla, y tocarla. Y nunca se ha parado de hacer, y nunca se parará, eso no lo dude nunca. Pero hay que tener en cuenta cuáles van a ser los objetivos y cuáles van a ser sus instrumentos, y no me refiero precisamente a los de la música. Por los milenios de los milenios la música se seguirá haciendo. -- Y por su puesto con el método de siempre. -- Por supuestísimamente, con el método más antiguo y más perfecto: el de la Armonía, de lo que usted ha empezado a hablar y hemos hablado. -- Señores, -interrumpió Beethoven- creo que hay que relajarse un poco, les noto tensos, y a los asistentes también. Hagamos un pequeño descanso. -- Perdone, Beethoven. -De nuevo hablaba Glass-- A todo esto ¿la gente sabe quién soy yo? Me temo que soy demasiado desconocido. -- No se preocupe por eso, el Tiempo lo dirá todo. (............Continuará..............) ___________________________________________________________ From: Revista de Ciencia Subject: Laser, Arte y Farmacos Iberoamericanos TECNICA LASER PARA LA CONSERVACION DEL ARTE La doctora Christina Young, de la National Gallery británica, ha desarrollado un método que utiliza un rayo láser para medir con exactitud cómo cambian físicamente las pinturas de los museos. Los resultados ayudarán mucho a los restauradores, que hasta hora no tenían una manera ideal para saber cómo afectaban, por ejemplo, las condiciones de temperatura o humedad, la edad o el transporte de las telas. Todas las evaluaciones se hacían a ojo directo o mediante aparatos ópticos, de manera que había que consultar los archivos para saber si un cuadro había sufrido o no algún tipo de deterioro. La doctora Young usa un láser mediante una técnica de interferometría que permite almacenar una imagen especial de la superficie de la pintura, mostrando la posición y características de cada punto individual, lo que posibilita una posterior comparación automática. Se trata de un sistema no invasivo que no perjudica en nada a los cuadros. http://www.iop.org/IOP/Congress/html FARMACOS IBEROAMERICANOS Cinco laboratorios farmacéuticos españoles han venido colaborando junto a varias entidades científicas hispanoamericanas en la consecución de un proyecto orientado a identificar plantas autóctonas de la Amazonia y de otras regiones latinoamericanas con propiedades medicinales, para aprovechar sus principios activos en las vertientes antitumoral, antiviral, antiparasitaria, antiinflamatoria e inmunomoduladora. Entre los primeros logros del programa, que ya han dado lugar a varias patentes y productos, cabe citar al dentífrico D-Bucal, elaborado a partir de las esencias de tres plantas. ___________________________________________________________